miércoles, 5 de julio de 2017

Diario literario # 3 (Julio 2017)

Hay un libro que he terminado recientemente de leer, pero me ha interesado de tal manera que lo estoy leyendo de nuevo. Sin embargo, ya no en un orden estricto, capítulo a capítulo, bueno, no siempre, luego de un capítulo retorno a alguna de las páginas marcadas con un post it, casi nunca hago eso con un libro pero esta vez era necesario. El tomo donde se halla esta historia es de tapa dura, de aspecto muy serio y los post it de colores le han dado un toque diferente a su apariencia, a veces lo serio se entiende bastante bien con lo colorido.

La historia en cuestión es "El amante de Lady Chatterley" de D.H. Lawrence. 

En el año 2001 cuando yo tenia dieciséis años, el profesor de literatura del colegio donde yo estudiaba, nos dejó de tarea leer un libro, pero uno diferente para cada alumno, a una compañera le  dejó "El amante de Lady Chatterley" y a mí, "María" de Jorge Isaacs. El profesor se dejó guiar por la forma de ser de cada alumno y en base a ello le asignaba un clásico que pudiera gustarle. Como yo era la callada y más tranquila del salón pensó que "María" al tratarse de una joven dulce, podría gustarme, la verdad ya no recuerdo bien la historia pero aunque no me disgustó tampoco me entusiasmó demasiado. Y a la compañera que le dejó el de D.H. Lawrence, era de esas chicas que ya con dieciséis años iba a fiestas, discotecas ... ella era la normal y yo la mancha horrenda, "Hay que señalar con el dedo a la chica que no habla, que no toma, que no va a discotecas, vamos a despreciarla, nosotras valemos más que ese "mueble"" . 

Y ahora, en pleno 2017 a mis treinta y dos años de edad, me encuentro sorprendida y satisfecha de que me haya gustado "El amante de Lady Chatterley" y no por revancha, sino porque en verdad las ideas expuestas por el autor son de mi interés. Lo que no recuerdo es cómo expusimos nuestras impresiones en el colegio, no sé qué le pareció este libro a la chica que mencioné antes. Y tampoco puedo afirmar si en esa época a mi me hubiese gustado "El amante de Lady Chatterley". Sólo puedo corroborar una vez más que uno nunca termina de conocer a las personas. Muchos que me ven cómo soy (y me refiero a mi entorno) por fuera se quedan con una sola impresión de mí y desde hace años tengo una etiqueta asignada por más de uno, pero no conocen mis emociones, mis aficiones (de las cuales casi nunca hablo), ni siquiera saben de este blog, en realidad no me conocen y parecen tratarme como si me conociesen mejor que yo misma.

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